Las flores suelen alegrarnos el día cuando las tenemos como decoración en casa. El tenerlas sembradas en macetas es garantía de un constante disfrute de nuestras flores si las cuidamos. Si ya tienes algunas plantitas en casa, sabrás que cuidarlas es una dedicación sencilla pero constante, sobre todo con las hermosas orquídeas. En este artículo te daremos los mejores consejos para que sepas cómo cuidar tus orquídeas y mantenerlas sanas y en buen crecimiento.

¿Qué es una orquídea?

Para empezar, es necesario conocer las orquídeas. Estas son plantas que crecen en una variedad de espacios, desde junglas hasta la tundra ártica, pues hay diversas especies de orquídeas. En un ambiente natural, las orquídeas tienden a adherirse a los árboles, pues de ahí las gruesas y blancas raíces absorben la humedad que usualmente viene de la lluvia o neblina.

Las orquídeas suelen ser plantas que, para estar en un ambiente interior, necesitan circulación de aire y de luz solar no directa para que puedan crecer y florecer de la mejor manera.

Tipos de orquídea

Existen dos grandes familias de orquídeas y aquí te las damos a conocer

Monopodiales

Las monopodiales, como su nombre lo explica, son el tipo de orquídea que solo tiene un tallo y de este crecen las flores. Dentro de este tipo, las especies más conocidas son la orquídea Vanda y la Phalaenopsis. Estas últimas son comúnmente orquídeas moradas y blancas, suelen crecer naturalmente en países como Taiwán, Filipinas y Australia.

Ramificación simpodial

Las orquídeas de ramificación simpodial son aquellas que, a diferencia de las monopodiales, crecen de forma horizontal y también crecen flores en sus tallos. Algunas especies que son simpodiales son la dendrobium, Cymbidium, Cattleya y Oncidium.

Según el tipo de orquídea sabrás cómo cuidarlas, pues si bien tienen cuidados similares, algunas requieren más cuidado que otras.

¿Cómo cuidar una orquídea?

Replantado

Para empezar, obtener una orquídea desde la semilla es un proceso complicado, por ello lo mejor para tener una es replantarla. Lo ideal será hacerlo después de la floración. Se debe traspasar la planta a una maceta o un pequeño huerto o jardín si fuera posible en casa. Al momento de traspasar la planta, recomendamos distribuir las raíces en todo el espacio posible. Como las orquídeas crecen en la corteza de los árboles, lo ideal es ubicarlas en la mezcla para orquídeas que contiene pequeñas cortezas de árbol y abono. No olvides regar en un periodo de tiempo constante.

Ambiente adecuado

El ambiente en el que crecen las orquídeas debe ser un lugar que asimile un poco su lugar natural. Es por eso que los ambientes en los que se desarrollan deben ser espacios aireados a los cuales llegue luz solar, pero no directamente. Las orquídeas prefieren una intensidad media en cuanto a luz solar. Además, hay que evitar los espacios cargados y las temperaturas extremas, aunque a estas plantitas les va mejor en los ambientes un poco fríos.

Riego

No se espera un riego frecuente en las orquídeas, de hecho, con una vez a la semana en etapa de floración es más que suficiente. Mientras no esté en etapa de floración, la plantita requerirá un riego menos frecuente.

Otro punto importante es cómo regar las orquídeas. Si las tienes en maceta con orificios, puedes regarla y escurrirla, o sumergirla en agua y escurrirla. De esta forma, las raíces y la tierra se humedece lo suficiente. Te recomendamos tener cuidado con regar de forma muy frecuente o con demasiada agua, pues las orquídeas se pueden ahogar.

Abono

Al no estar en su ambiente natural, las orquídeas necesitan de nutrientes para que crezcan bien. Por ello, te recomendamos apoyar con fertilizante, de preferencia líquido. Especialistas recomiendan que sea una medida de abono cada dos riegos o en su defecto, cada 20 días en etapa de descanso y cada 12 en etapa de floración.

Recomendaciones

En conclusión, las orquídeas requieren un cuidado constante, sin embargo, su belleza vale el esfuerzo. Un último tip que podemos darte, es que pasada la etapa de floración, cuando todas las flores han caído, corta el tallo en la primera yema. Así te aseguras de que tu orquídea vuelva a nacer.

Ahora que ya tienes todos los consejos necesarios para cuidar de tu orquídea en casa, ¿te animas por una?

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